Colección de Gemas y bienestar de Mukhas Collection

Los altares representan ese rinconcito espiritual donde sumergirnos en nuestros pensamientos, deseos, anhelos, donde recordar nuestra gratitud.. y por todo ello son potentes espacios de poder.

Es común disponer de un espacio en nuestro hogar en el que reunir nuestros objetos más preciados, que simbolizan un algo especial por cualquiera de los motivos posibles, con los que nos sentimos conectados, o que constituyen nuestro talismán. Este es nuestro espacio más personal, que adquiere un significado profundo, llamémoslo «altar», y quizás alejándonos de su connotación más religiosa.

Ya sea un altar dedicado a la meditación, al recuerdo de nuestros seres queridos, de rituales, o de todo aquello que queramos conmemorar, sin duda ponemos toda nuestra alma en estos espacios tan significativos. Os detallamos algún tip extra para vuestros altares o para aquellos que quieran iniciarse en uno.

Un espacio de calma

No existe un espacio mejor o peor donde situarlo. Dejemos que nuestra intuición nos guíe; seguramente ya hemos iniciado ese lugar preciso, y quizás sin ser conscientes de ello, en el que hemos colocado diferentes objetos importantes para nosotros y ya sea sobre una mesa, estantería, caja, lugar en la terraza o jardín, rincón… e incluso una habitación si tenemos el lujo. Puede haber diferentes espacios para tal fin. Eso sí, debe ser un espacio que nos evoque paz.

Algunos pensadores y maestros yoguis como Swami Vivekananda recomienda no dormir en la habitación del altar, y entrar bañado y limpio de cuerpo y mente. Crear una atmósfera, que por el mero hecho de entrar o de acercarnos nos inspire calma.

Mi rinconcito espiritual 

Un altar es un espacio tremendamente personal, quizás el que más. Lo común puede ser disponer alguna figura o imagen religiosa o filosófica, de dioses o deidades e incluso en su recuerdo a la imagen de un familiar, amigo o de nuestra mascota.

Velas, flores, incienso, que alegren el espacio y despierten nuestros sentidos, e incluso algún pañuelo o mantel decorativo. Todo suma y nada resta a la hora de exponer todo aquello que suponga un algo mágico, personal, especial… para nosotros, en una composición que nos inspire.

En Bali, además de flores de aroma dulce como Frangipani, incluyen pequeñas ofrendas de comida, todo ello dispuesto sobre hojas de bananero. Acomodan estos pequeños lugares sagrados tanto en hogares como espacios de trabajo (¿quién no ha visto un San Pancracio con una moneda en un negocio?)

Las Gemas, nuestras grandes aliadas

Su belleza y energía inspiran cualquier altar. Ya sea representando los elementos con sus gemas particulares, o los siete Chakras, cualquier aportación es sin duda un extra.

Drusas y puntas, formas en bruto, talladas, nuestros malas… todas sean bienvenidas, optando por aquellas que más se identifiquen con el propósito de nuestro altar o con aquellas por las que nos sintamos más atraídas.

Pack de Gemoterapia de Mukhas Collection

Os invitamos a poner en práctica estos espacios tan especiales, sin olvidar que nuestro verdadero altar está en nosotros mismos.

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